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Química

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Por Ricardo Soca ///

La ciencia que estudia las sustancias puede ser abstrusa o hasta inaccesible para muchos, pero no oculta más misterios que los debidos a nuestra ignorancia; nada que no se resuelva con algunos libros y tal vez un poco de laboratorio. Sin embargo, en sus orígenes, cuando todavía se llamaba alquimia, era una actividad mágica y misteriosa, propia de iniciados, cuyas raíces se remontaban a los estudios de Platón, retomados por los árabes hacia el siglo VIII de nuestra era.

Mientras Europa permanecía sumida en la noche medieval, los árabes experimentaban el tratamiento de los metales en busca de la piedra filosofal, que les daría la clave del arte de combinar y descomponer sustancias para elaborar oro. El primer alquimista europeo fue el inglés Roger Bacon (1220-1292), que fue perseguido por la Iglesia católica y tuvo que exiliarse en París.

Para su suerte, su protector y amigo, el cardenal Guy le Gros Foulques, llegó en 1265 al trono de Roma con el nombre de Clemente IV y le pidió un informe sobre sus experiencias en una carta secreta. El filósofo inglés dedicó dos años al informe, del que resultó su llamado Opus Majus (Obra mayor). Tanto él como Paracelso (1490-1541), los mayores alquimistas del Renacimiento, son considerados hoy como los precursores de la ciencia experimental.

Alquimia y química se derivan de la voz árabe kimiyá, que significa «piedra filosofal». Se ha sugerido que kimiyá, a su vez, proviene de kimi, que significa «negro», palabra árabe con la que se designaba a Egipto, para señalar su aura de disciplina oculta o misteriosa.


Grageas de lenguaje
¿Hay una abreviatura para “fonoaudiólogo”?
No hay una abreviatura convencional para esta palabra. El usuario puede realizar la que estime más conveniente. Tendrá en cuenta que la abreviatura debe ser eficaz: suprimirá como mínimo dos letras de la palabra abreviada (si la palabra es larga, es mejor que sean tres letras, lo que permite el ahorro de dos caracteres –una de las letras suprimidas es reemplazada por el punto de cierre). No obstante, hay ejemplos, como vid. por vide (‘véase’), en los que solo se suprime una letra.

Existen dos procedimientos para formar abreviaturas:

1) Por truncamiento, suprimiendo letras o sílabas finales: cód. por código, art. por artículo. En este caso, la abreviatura nunca debe terminar en vocal. En el caso de las abreviaturas que corresponden a fórmulas fijas, se abrevian todas y cada una de las palabras que las integran, incluso artículos, preposiciones o conjunciones, reduciéndolos a la letra inicial: s. e. u o. por salvo error u omisión, q. e. p. d. por que en paz descanse.

2) Por contracción, eliminando letras centrales y dejando solo las más representativas: dpto. o depto. por departamentoadmr. por administrador. Entre las abreviaturas formadas por contracción están las que presentan la letra o letras finales voladas: n.o por número, af.mo por afectísimo.

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Lengua curiosa, el blog de Ricardo Soca en EnPerspectiva.net, actualiza los martes con los secretos que albergan las palabras en su significado. El primer martes de cada mes incluye también una de sus Grageas de lenguaje.

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