EC —La falta de contacto con la realidad no fue solo de los extrabajadores de Pluna que impulsaron Alas U. Esa misma confusión se dio en el gobierno, que le dio espacio. Para empezar, le dio dinero, porque tuvo un respaldo financiero, un capital de arranque flojo, pero ese dinero era de toda la sociedad uruguaya, era del Fondes.
VR —Yo no soy quien para darle a nadie, pero si recorre algunas veces que he opinado, porque me preguntan sobre el tema, ahí di opinión sobre ese asunto de las inversiones que en su momento fueron decididas por el gobierno. Y si va más atrás, también va a encontrar que ya di opinión respecto al cierre de Pluna.
EC —Un oyente, Diego, propone ese punto de partida para el análisis: “A la luz de la experiencia de Alas Uruguay, ¿no cree que el gobierno de Mujica se apresuró al tomar la decisión de cerrar Pluna SA? ¿Por qué no le dieron a aquella empresa dirigida por Campiani el combustible al precio que ahora tenía Alas U? ¿No fue la Pluna de Campiani la mejor de la historia, a pesar de sus problemas financieros?”.
VR —Es verdad, es así, los números lo indican.
EC —¿Es verdad?, ¿fue la mejor Pluna de la historia?
VR —Los números lo indican. No me pregunte a mí, pregunte al aeropuerto cuáles son los movimientos, pregunte a la Dinacia cuáles fueron los movimientos de esa época. Todavía hoy no ha recompuesto el nivel de conectividad que tenía en ese momento, y era fundamentalmente la planificación de servicios, que desde luego no era perfecta y tuvo debilidades que sirvieron para que se precipitara el fracaso en esa área, pero en el 2010-2011 se alcanzaron los mayores niveles de tránsito por el aeropuerto de Carrasco. Eso no solo es indudable, sino que algunos otros operadores ven la oportunidad de restablecerlo, cuando por ejemplo nos visitan autoridades de la empresa Azul proponiendo el desarrollo de un sistema de conexiones que desde Carrasco se vincule con una serie de ciudades de la región.
EC —Azul es una empresa brasileña.
VR —Importante.
EC —Por otro lado tiene intenciones similares Amaszonas, en ese caso una firma de origen boliviano.
VR —Y cuando a las pocas horas de que Azul hace público ese interés, viene a Montevideo e inicia las gestiones, Amaszonas promueve y presenta, como lo hizo en el día de ayer, un conjunto de opciones que tienen que ver con la afirmación del puente aéreo Carrasco-Aeroparque, que siempre fue un punto fuerte de las conexiones de Uruguay con la región, porque a partir de ahí se realizan toda una serie de trasbordos y combinaciones, y también ofrece la empresa Amaszonas, pero ya en concreto, con fechas y con inversiones que comprometió ayer públicamente, también para restablecer una red que está buscando dar respuesta a una debilidad, a una carencia que hay en el lugar.
EC —¿El aeropuerto de Carrasco recuperaría esa condición de hub regional que tuvo en la época de Pluna SA?
VR —No en el mismo cuadro, porque el mundo no se mantiene inmóvil, ya se han desarrollado otras alternativas, y otras ciudades que antes prácticamente eran subsidiarias del aeropuerto de Carrasco ahora pasaron a ser ellas mismas centros de distribución.
EC —¿A cuáles alude?
VR —A Asunción. Estos elementos no se tuvieron en cuenta; la verdad es que toda esta etapa ha sido triste en esta materia.
EC —Y ahora, concretamente, estas dos empresas, ¿qué panorama abren por delante? Usted mencionó las reuniones de ayer con Amaszonas. ¿De qué fechas se está hablando? ¿De abril del año que viene?
VR —No, Amaszonas ya está volando.
EC —Pero el desembarco fuerte, con más aviones, con inversión.
VR —Ellos ofrecen ya a partir de marzo; el programa lo dieron a conocer ayer, por lo tanto no lo conozco de memoria. A partir de marzo del año 2017, con las autorizaciones correspondientes, que tendrán que gestionar; tienen la facilidad de ser ya una empresa en marcha, una empresa volando, van a empezar a aumentar el número de frecuencias en el puente aéreo y a incorporar nuevos destinos a los que ya están cubriendo, a reforzar la comunicación con Asunción. Creo que es un desarrollo bien interesante para Uruguay, como es bien interesante la propuesta de Azul, como ha sido una excelente noticia que Avianca anuncie su voluntad de conectar directamente Carrasco con Bogotá, porque para los uruguayos viajar al Pacífico norte dentro de América del Sur es más difícil que ir a Dubái. Más difícil y a veces más caro. Tenemos que procurar contribuir a que el Uruguay, a través de los caminos que se le van ofreciendo, pueda recomponer esa conectividad que en el mundo de hoy cada vez es más importante para que los países estén integrados y puedan desarrollar negocios.
EC —En los casos de estas dos empresas que estamos mencionando, Azul y Amaszonas, se anuncian inversiones, una cantidad de aviones concreta que estarían operando desde el aeropuerto de Carrasco, y se anuncia la posibilidad de incorporar empleados provenientes de Alas U. No todos, ni por asomo; en el caso de Azul, 25 empleados por avión y 12 técnicos en tierra. ¿Cómo están manejando en el gobierno este problema complementario de la muerte de Alas U, el personal que queda sin tareas?
VR —Recibimos a Azul con el ministro de Trabajo y la ministra de Turismo, y tengo entendido que ayer Amaszonas hizo también su presentación a la ministra de Turismo. Tenemos bien presente que hay uruguayos que necesitan trabajar y que entre los problemas que hay que atender frente a esta situación que vive Alas U el tema del trabajo de esos uruguayos es prioritario. En la medida de lo posible vamos a procurar facilitarlo.
EC —Y los que no ingresen en estos planes, ¿seguro de desempleo prolongado? ¿Cuál es la alternativa?
VR —No me pregunte a mí cosas que no…
EC —Viene muy largo ya el seguro de desempleo a exempleados de Pluna.
VR —Sí, pero no me pregunte a mí por cosas que no manejo, no sé cómo son. Además creo que para los funcionarios, los profesionales del transporte aéreo hay un mercado que demanda empleados en el mundo. Lamentablemente siempre es más lindo trabajar en casa, pero a veces se abren otras posibilidades y hay muchos uruguayos que con más o menos ganas lo están haciendo.
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