El artículo. 116 del proyecto de Rendición de Cuentas a estudio del Parlamento introduce la obligatoriedad de pagar un mínimo de 13 jornales a todo trabajador eventual contratado para la estiba portuaria, dice Diego desde la audiencia, y ello derivará en perjuicios para todas las partes involucradas.
En estos momentos, el Senado discute el proyecto de ley de Rendición de Cuentas, que ya tiene la “media sanción” dada por la Cámara de Representantes. Dentro de esa ley "ómnibus", como suele pasar (y de manera muy cuestionable), se introducen "por la ventana" temas que muchas veces no consiguen ser sacados adelante por otras vías legales, y que son finalmente aprobados "en el paquete" y sin mucho cuestionamiento. Uno de ellos el que se expresa el art. 116, cuyo contenido refiere a la obligatoriedad de que las empresas de estiba portuaria deban asegurar un mínimo de 13 jornales a todo trabajador eventual que empleen, así sea por un día.
Más allá de la clara afectación de las empresas involucradas con la manipulación de cargas que demandan alto empleo de mano de obra (por ejemplo, cargas a granel de arroz, madera, etcétera), lo que no tuvieron en cuenta los promotores de ese artículo (lamentablemente "bendecido" por las autoridades de ANP y de MTOP) es que esa regla no va a perjudicar solo el bolsillo de empresarios sino al propio trabajo, al empleo y seguramente a los propios salarios de algunos trabajadores. Indudablemente también va a perjudicar a la eficiencia operativa en puerto: si una empresa debe asegurar esa cantidad de jornales a toda persona que emplee, así sea por una hora, es muy probable que la empresa decida contratar a menos gente en caso de simultaneidad requerida para la prestación de servicios (por ejemplo a la carga de dos buques en simultáneo), quedándose con solo parte del personal operativo y atendiendo a los buques de a uno (obviamente dejando uno a la espera).
Respecto al empleo, y sin perjuicio de que las cargas de exportación se seguirán ejecutando y "alguien va a pagar la cuenta", está claro también que si una empresa tiene empleados que ya generan 18 jornales y tiene que agregar uno nuevo al cual debe pagar 13, no sería de extrañar que decida reducir las horas del primero, ya que las del segundo ya están en los costos. Ni que decir que en otros casos en que la carga sea de tránsito y no genuinamente nacional, es posible que algunas empresas decidan achicarse o cerrar, y ahí perdemos todos.
Diego Moltini
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