El Partido Demócrata proclamó a Hillary Clinton como candidata a la presidencia de EEUU.
La convención, que viene sesionando en Filadelfia, estuvo marcada por divisiones internas en la previa. Los delegados más fieles al senador socialista de Vermont, Bernie Sanders, denunciaron que el proceso de elección estuvo sesgado hacia Clinton y por eso se amordazaron las bocas en señal de protesta. Pese al malestar en su sector, el propio Sanders terminó pidiendo el voto para Clinton y le brindó su apoyo expreso durante su intervención.
Paralelamente, Wikileaks filtró decenas de correos electrónicos del Comité Nacional Demócrata que revelan cómo la cúpula del partido operó en contra de la candidatura de Sanders.
El escándalo, que le costó el cargo a la jefa del comité, Debbie Wasserman, está siendo investigado por el FBI que no descarta una acción de las agencias de inteligencia del Gobierno ruso, que está enfrentado al Gobierno demócrata de Barack Obama.
Este fue uno de los temas tratados en La Mesa de los Jueves con Esteban Valenti, Antonio Mercader, Fernando Butazzoni y Carlos Ramela.
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