El Gobierno de nuestro país expresó ayer su “preocupación” por el inicio de un proceso de impeachment contra la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, aprobado el domingo en la Cámara de Diputados.
En un comunicado emitido por la Cancillería se considera que la decisión afecta la “estabilidad política” de país norteño y se expresa la confianza en que el resto del proceso, que ahora sigue en la Cámara de Senadores, se “desarrolle en el marco de la Constitución” y con la “correcta utilización de las herramientas”, como el juicio político, previstas en la carta magna brasilera.
En el Frente Amplio, sin embargo, parece haber problemas para alcanzar un posicionamiento común con respecto a este asunto. El martes la bancada de diputados oficialista no pudo aprobar una declaración sobre el tema, ya que algunos representantes del Frente Líber Seregni no estaban dispuestos a calificar la decisión de la Cámara Baja de Brasil como un “golpe de Estado parlamentario”, algo que sí hizo el Secretariado Ejecutivo del Frente Amplio en una resolución que emitió el lunes.
Este fue uno de los temas tratados en La Mesa de los Jueves con Antonio Mercader, Esteban Valenti, Carlos Ramela y Fernando Butazzoni.
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