Tras cinco días de conteo, la Oficina Nacional de Procesos Electorales de Perú declaró el viernes pasado a Pedro Pablo Kuczynski como ganador de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales.
El economista de 77 años obtuvo el 50,12% de los votos frente al 49,88% que cosechó Keiko Fujimori, hija del ex presidente Alberto Fuijmori preso por corrupción y violaciones a los Derechos Humanos.
Pese a que perdió la elección presidencial, el fujimorismo se quedó con la mayoría absoluta en el Congreso, lo que fuerza a Kuczynski a formar acuerdos para alcanzar la gobernabilidad.
Con ese objetivo en mente, el presidente electo ya pidió disculpas por asociar a Keiko Fujimori con el narcotráfico durante la campaña.
Según distintos analistas uno de los principales desafíos de Kuczynski será atacar el crimen organizado y el narcotráfico, un problema que el 70% de los peruanos considera grave. En el plano económico no se esperan grandes dificultades ya que el país presenta índices de crecimiento superiores a la región y el presidente electo y Fujimori convergen en un modelo neoliberal.
Recordemos que en 2011 el propio Kuczynski había llamado a votar por Keiko Fujimori, cuando disputó el balotaje con Ollanta Humala. Sin embargo, en esta elección el político conocido como PPK obtuvo el apoyo de los partidos antifujimoristas, entre ellos el del partido de izquierda Frente Amplio.
Este fue uno de los temas tratados en La Mesa Internacional con Mauricio Rabuffetti, Darío Klein, Rafael Mandressi y Nicolás Albertoni.
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