Galgomundo

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Las opciones eran dos: o empezaba a escuchar el playlist de Galgomundo y escribía, o abría el libro, y seguía con la historia interminable de Ferguson.

Elijo la primera.

La del Galgo se empezó a escribir en 2007, íbamos en un auto acampar con unos amigos, habíamos dejado la ciudad atrás hacía unas horas, yo no manejaba y no sé a qué departamento íbamos, pero cunado llegamos me encontré con un río en el que nunca nadamos.

Iba en el asiento de atrás, eso sí me acuerdo.

—¿Qué plan para este verano?—No sé cual me pregunto.

Pensé en comprar Los Cardos, pero piden mucha plata. En aquel momento no era tanta. Mas caro salió alquilar ocho años más tarde el parador frente a la Sierra de las Ánimas.

Un giro en destino, La ronda en el camino, como dice la canción, fue lo que vino después.

—La ronda en el camino, eso pensé.

—¿Cómo seria eso?—Puede haber preguntado cualquiera de los tres, el Cabra, por decir uno que le gusta preguntar porque sí.

—Simple como la canción de Songs Ohia—contesté enseguida.

—¿Qué decis, Pips?—Este tiene que haber sido mi amigo de la infancia, a los otros lo conocí en los días de liceo, eso había quedado atrás hacía cinco años.

Just be simple, en el camino, para que todos los que van al este con un loro en el hombro puedan frenar, pero eso ahora va a tener que esperar. Piden el doble de lo que tengo por Los Cardos—Esta parte de la charla fue en el asiento de atrás, no sé quiénes iban adelante, voy a tener que comunicarme con uno de ellos, el que seguro me acuerdo venía en el back seat, Mr. T.

Este años se cumplen 50 años de un libro que se llama En el camino.

—La otra es conseguir un ómnibus de esos que eran de la Onda, y salir a recorrer todas las playas.

—No sé de qué hablas.

—Puedo ir a todos los lugares de la costa. Pasar por todas las playas, chocarme con los faros y estaciones de tren que aparezcan en el camino. Durante el trayecto podemos ir leyendo el libro de Jack Kerouac—Se lo cuento como si lo hubiera pensado antes, pero en realidad se me ocurrió en ese momento.

—Conozco alguien que alquila ómnibus de la Onda para rodajes.

—Voy a precisar que me pases el numero de ese que conoces.

Tuve que ir hasta la curva de Maroñas, cerca de donde corren los caballos.

Pensar que mi madre venía todos los fines de semana al hipódromo. Mi abuelo la adoptó en el campo cuando era chica y la trajo a las carreras y a la ciudad.

Nunca le falto nada hasta que mi abuelo murió. Till the money runs out.

En el 80, siempre me gusta pararme en ese año exacto, pero puedo averiguar un poco mejor las fechas exactas, íbamos en el Mazda 323, un auto beige, escuchando Radiomundo hasta Los Cardos. En ese tiempo era un viaje largo hasta Punta del Este y era obligatorio parar en busca de perdices y algo de tomar.

En alguna parte de Maroñas estaban los galgos de Luis (conozco a alguien que los alquila para rodajes). El que va a recorrer el mundo me estaba esperando. Siempre iba a ser ese, empadronado en Rocha, y el que nunca me va a llevar al CTI, o al intermedio, por que en la matricula dice CTI y un número al que nunca le jugué a la Quiniela, por suerte, sino sería mi tío Martín la vez que le dijeron qué numero jugar y no lo jugó. Era la fecha de mi cumpleaños, tenía que jugarle a dos, no me acuerdo cuál salió, si los años que dejaba de cumplir o los que cumplía.

Me lo encontré en la plaza Zabala, el salió del estudio y yo de mi casa. En alguna parte estaba mi madre, que se lo cruzó y le cantó los números. El jugo otros. Típicos vicios del azar.

Suena Shadowboxer. Si mi mamá no fuera Clotilde, sería Fionna Apple. Una nueva pregunta de Segundo intento se me acaba de ocurrir.

Escribir es para alcohólicos, raro aún no me hice uno de estos.

Si mi madre publicara su memorias, que de esta aún le queda, estaríamos parados arriba de un best seller, que es justo lo que necesitamos para salir a recorrer el mundo en el Galgo.

Ahora solo se trata de eso. No todos podemos salir a salvar ese pobre niño, es si que es pobre.

Vamos a salvar el mundo con el Galgo. Va a sonar una y otra vez la canción de los Silver Jews hasta que se la aprendan de memoria la letra de la canción. Yo vengo haciendo los deberes por ustedes y no me quejo.

Cierto que algunas veces me quejaba, pero me estoy acostumbrando a lo contrario.

Fin del programa, llegó el 121 a Plaza Independencia.

Un día le voy a sumar 7 y iré a dar al Palacio de la Luz.

***

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Los que participaron: Pablo, Felipe, Alicia. Invitados: Eduardo Roland, Andrés Mailhos, Santiago Musetti, Nick Cave.

Galgomundo, sábado de 14 a 18, repite los domingos de 18 a 22 en Radiomundo 1170 AM.

Para participar del sorteo de las invitaciones para la proyección de Distant Sky el jueves 12 de abril, escribí a galgomundo@radiomundo.uy

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