RA —Otro tema que ha llamado mucho la atención o que concita algo de preocupación es el aspecto de la seguridad vinculada al turismo. Hay una pancarta que dice “Acá también robaron”, que se viralizó, por una casa alquilada por una familia de argentinos que fue robada en Manantiales. La imagen se viralizó y además fue portada en algunos medios de ese país. ¿Cómo vivió este episodio? En Maldonado está claro que una apuesta fuerte en materia de seguridad es el centro de monitoreo que se acaba de inaugurar. ¿Qué otras medidas se tomaron en este departamento para cuidar la seguridad en materia turística?
BL —La seguridad es algo de lo que hace el diferencial a favor de Uruguay. Nosotros podemos mirarlo desde el punto de vista de los uruguayos, tenemos un debate abierto y está bien que se tenga, pero tenemos una realidad relativa que hace a cómo vive la persona en su lugar habitual y viene a Uruguay a pasar la recreación. Son dos situaciones un poco distintas. Lo que sí es absoluto es la necesidad de avanzar y tener las mejores condiciones para la seguridad, que no es solamente el problema de los robos. Acá hay seguridad alimentaria, hay seguridades que tienen que ver con otros aspectos del aprovechamiento del tiempo libre y la recreación.
Desde ese ángulo, cuando vi la foto y la pancarta que se viralizó, lo primero es que soy solidario con la persona a la que le ocurrió eso, porque lo primero que tenemos que sentir es que vino a disfrutar y tiene un problema. Lo segundo es cómo se expresa, hay diferentes formas de expresarlo. Lo tercero es saber, desde el punto de vista nuestro, que no necesariamente toda la ciudadanía sabe, pero se ha tratado de trasmitir, que se tomaron medidas. Porque tener un puesto de monitoreo quiere decir que hace unos cuantos meses se tomaron medidas para llevar adelante una determinada infraestructura que permita esa situación. Lo mismo que los fondos que hasta el año pasado aportaba el Ministerio de Turismo. Ahora tienen otra estructura, para el apoyo de lo que se denomina el Verano Azul, o las horas de funcionarios que se tienen en el territorio. Además este año se ha colocado más infraestructura logística con relación a cómo se está brindando la seguridad. Pero si aumentamos el número de personas sobre el territorio, aumentan las probabilidades de problemas, y no solo de seguridad. Aumentan las colas en los supermercados y aumentan otras cosas.
RA —¿Y en el caso de Rocha? Porque mire el mensaje de Alicia: “Me gustaría que el entrevistado toque el tema de la inseguridad en Rocha. Yo estoy en La Pedrera y acá es tierra de nadie. Ya hay turistas argentinos que han cancelado reservas de alquiler por robos a sus coterráneos”.
BL —Tuvimos información de La Pedrera, tomamos contacto antes de fin de año con las autoridades del lugar, nos trasmitieron cuáles eran las medidas operativas que se iban a tomar. En general, no quiere decir que no haya el problema, pero en los primeros días cuando llegan los turistas se verifica el mayor número o lo más “escandaloso” –perdón– como fenómeno. Luego a lo largo del período, si se detienen o se recuperan cosas que se robaron en esos días no es noticia.
En La Pedrera se aumentaron los efectivos, se tomaron algunas medidas de destacamentos de la Republicana en determinados lugares del territorio. Pero se imagina que con 200 kilómetros de costa a lo largo de los cuales están los turistas no siempre es fácil. Lo de La Pedrera lo conocimos, incluso la propia ministra estuvo en contacto con algunos de estos visitantes y en el territorio a los efectos de saber mejor cómo habían sido la situación. En este caso y en el de Maldonado hemos trasmitido nuestra preocupación a los efectos de intercambiar con aquellos que están llevando adelante la tarea qué tienen previsto, de qué manera están operando. Lo seguimos, no es un tema respecto al cual sintamos que no tenemos nada que ver. Al contrario, nos preocupa, tratamos de ver y cuando teníamos que ver con el aporte para reforzar los fondos que permitieran funcionar, lo hicimos durante varios años.
RA —Otro oyente dice: “No veamos solo las malas. Pese a los temporales, todas las bajadas a la playa fueron reparadas y en muchos casos han sido muy mejoradas”.
BL —Una de cal y una de arena.
RA —Se llegó a cumplir en tiempo y forma.
BL —Recuerdo una denuncia que se hizo viral con relación a alguna de las bajadas para personas con discapacidad que no estaban con el mantenimiento correcto. Ya no estoy hablando de temporales, estoy hablando de cosas que en la medida en que se tiene la información y no se está cumpliendo con lo que corresponde algunas de esas denuncias ayudan. El tema es lo transformo en escándalo o lo transformo en aporte para tratar de resolver un problema que efectivamente existe. Y desde el punto de vista de las autoridades, no quiere decir que a toda crítica hay que ponerle intencionalidades; efectivamente, hay personas que pueden estar sufriendo una situación y merecen la atención correspondiente.
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La transcripción de esta entrevista es un servicio de:
Facal & Cía., desde 1958 asesores en comercio exterior y aduanas
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Transcripción: María Lila Ltaif
