EC —Es curioso, porque en el Partido Nacional (PN) las reacciones, por lo menos las iniciales –pienso en el senador Luis Alberto Heber–, fueron por el lado de “es cierto, Vázquez dijo que Bonomi se queda, pero al mismo tiempo admitió muy claramente que el Gobierno está dispuesto a girar, a hacer un cambio en las políticas de seguridad pública, y eso es más de lo que esperábamos”.
TV —Los proyectos de ley que presentó el presidente Vázquez –que además hay que pulirlos bastante– no muestran un gran cambio, no hay ninguno que uno pueda decir “esto atiende a solucionar ya la problemática de la gente”, de los honestos y trabajadores de este país, que son la inmensa mayoría y que están cada vez más encerrados entre rejas, con medidas de seguridad y atemorizados de salir de su casa y dejarla sola o de caminar por la calle. Al revés, algunos proyectos tienden a medidas sustitutivas, sigue con una filosofía general que atiende a los derechos, a la problemática humana de los delincuentes. Cosa que no digo que no se haga –porque si no enseguida se toman a mal las palabras y por el otro lado–, lo mismo que los temas de fondo que están en la base del delito y que también hay que atacar y mirar, que son los temas sociales, económicos, educativos ni que hablar, es decir, los grandes problemas que tiene el país y que están en la base del problema del delito. Solo que mientras estas políticas más de mediano y largo plazo y más profundas dan su resultado, el Estado, el Gobierno tiene que asegurarle la vida en paz y su propia vida a la ciudadanía trabajadora y honesta.
Y no hay un cambio de filosofía, es aquella filosofía que empezamos a ver ya en el comienzo del Gobierno del doctor Vázquez con el ministro José Díaz, quien, como teníamos un problema de hacinamiento en las cárceles, presentó un proyecto de ley llamado de Humanización de Cárceles, que pasaba por liberar al 50 % de la población carcelaria, no por intentar solucionar, que es un tema urgente, el de las cárceles, el hacinamiento, la verdadera rehabilitación de los presos, el buscar que no haya una incidencia tan grande de la reincidencia como hay en este país.
Entonces no vemos en la presentación de esos primeros proyectos un cambio, algo que nos diga que realmente va a cambiar la política. Y si se mantiene el mismo ministro, el mismo equipo…
EC —¿Y estas cosas no son justamente las que hay que discutir en ese ámbito? ¿No hay que plantear la necesidad de otro tipo de cambios? Esto mismo que usted está señalando aquí en la entrevista, ¿no es lo que hay que hablar en esas mesas de diálogo? Lo pregunto a partir del hecho de que usted está proponiendo retirarse.
TV —Yo estoy proponiendo retirarme de ese ámbito, del ámbito con el ministro Bonomi, y seguir en el ámbito parlamentario, que –al decir del senador Agazzi– es el ámbito natural donde debatir los proyectos de ley, que es lo que estamos proponiendo en estos momentos.
