EC —Según decía Daysi Iglesias cuando la consultaba la producción de En Perspectiva, este programa tiene poco alcance, por ejemplo cuenta con un grupo de técnicos reducido, cuenta con un solo abogado.
IB —Sí, eso es verdad, tiene un abogado… están haciendo cursos en lo que se hace en mediación. Tuvimos un antecedente en la administración anterior, cuando yo era consejera. Se trabajó con un equipo argentino que vino a Uruguay, trabajamos en este sentido con algunas mediaciones en colaboración con el Ministerio de Educación y Cultura, que los había contratado. Se trabajó en algunas propuestas interesantes que iban a trabajar en diferentes escuelas para dar algunas estrategias. Hoy ya estamos trabajando con el equipo en la escuela, el equipo ahora se instala en esta escuela por lo que yo decía, para reconstruir esta situación de alto impacto. Evidentemente, por las magnitudes que esto está tomando… es decir, presupuesto para psicólogos, trabajadores sociales, no tenemos un equipo por escuela.
EC —¿Entonces?
IB —Realmente, un equipo por escuela… si hubiera estado una psicóloga en la escuela no sé cómo habría podido intervenir en esta situación que tomó por sorpresa a todos.
EC —Quizás no era cuestión de que interviniera cuando se precipitaron los hechos, sino antes.
IB —No, por eso explicaba, que esta familia, esta mamá está contenida desde otros lugares también. Ayer hicimos todo el análisis, es una familia, como dice el fiscal, que está en alta vulnerabilidad, pero que tiene otros apoyos que estaban actuando. Ahora tenemos que unir si esa reacción de la mamá no fue porque nosotros la llamamos por una situación puntual, para que tenga en regla todo lo del niño, y por otro lado los otros lugares a donde asiste el año también la estaban exigiendo y por algún lado ella canalizó.
EC —¿Ahí hay un frente a trabajar, la coordinación con otras instituciones del Estado vinculadas a este tipo de contextos?
IB —Sí, pero mire que la hacemos. Los niños más pequeños van a una fundación, Don Cristóbal creo que se llama. Las distintas coordinaciones se hacen. Evidentemente vamos a tener que insistir en lo que le decía al inicio, armar algo, hay gente que se ofrece voluntariamente a armar un equipo de trabajo y pensar entre todos algunas otras estrategias.
¿Recuerda que hace dos o tres años hicimos una carta a los padres? Después me dio bastante rabia, porque nos salió mucha plata hacer la carta, una por escuela, para cada niño, para los 350.000 niños que tenemos. Esa carta decía que la forma de trabajar con la escuela es mediante el diálogo, que no existe otra forma que no sea el diálogo… Esa carta nos costó tanto, con la moñita y todo lo demás –digo tanto porque costó dinero y además fue todo un esfuerzo–, y al poquito tiempo tuvimos un episodio. Yo decía: se ve que la carta no llegó, la tiraron… Uno busca estrategias… Y desde el punto de vista programático, desde los 3 años está trabajar la violencia entre pares, los vínculos. El niño entra a la escuela con 3 y este tema está trabajado transversalmente hasta llegar a sexto año donde se trabaja la violencia en la familia, la violencia en los espectáculos públicos. Son temas que los maestros enseñan, que se trabajan en el aula.
EC —En cuanto a lo que se está haciendo ahora, hay un protocolo de actuación vigente para este tipo de hechos, que incluye “denuncia policial y/o judicial por parte de los docentes agredidos; solicitud de medidas cautelares al juzgado competente de protección al maestro en las situaciones que lo requieran; acompañamiento y asesoramiento de la abogada asignada por la División Jurídica de este Consejo; apoyo de los equipos psicosociales del programa Escuelas Disfrutables, de inspectores de zona e inspección departamental; análisis de las alternativas institucionales: restitución del vínculo con la familia o el traslado del alumno a otra institución educativa”. ¿Qué es esto último?
IB —Cuando el vínculo no se puede reconstruir; obviamente el traslado es la última alternativa. El día miércoles 6 esa escuela tenía propuesta una reunión, un evento, ya tenían encargadas las tortas, etcétera, con la familias. Obviamente a los maestros a los que les sucede esto les pedimos que primero se recuperen ellos, porque no pueden estar así frente a una clase, pero ayer tanto la directora como esta maestra dijeron que más allá de que se iban a tomar el día lunes y el martes, iban a estar. Quiere decir que de parte de la escuela está puesto lo mejor de sí.
