EC —La respuesta que yo escuché y que el propio ministro de Transporte, Víctor Rossi, planteó acá fue: sí, seguramente ese sería el trazado ideal, pero no hay forma, no dan los tiempos y no dan los costos.
MA — Pero ¿y cuáles son los tiempos si ahora están hablando de que recién en 2022 la empresa va a saber decirnos si se queda o no? ¿De qué premura estamos hablando? ¿Y costos? Nunca vi una sola cifra. Las solicitamos para ver de qué se trataba, nunca vinieron.
EC —La respuesta es que por una cuestión de costos y de tiempo de ejecución de las obras de acondicionamiento, la decisión se adoptó por el lado que usted no prefiere.
MA —No soy yo, es la propia Departamental que prácticamente por unanimidad está pensando lo mismo. Y mucha otra gente, recuerde una nota que yo no redacté –alguna gente pensó eso– que dio a conocer una cantidad de gente amiga –muchos de ellos arquitectos e ingenieros– para solicitar que eso se discutiera. Tenía más de 2.000 firmas y estaba encabezada, entre otras personalidades, por Belela Herrera y Gerardo Caetano, gente de la cultura; gente que además no sé lo que vota, dicho sea de paso. Eran universitarios, profesores, gente de la cultura, hijos de la Coruña, como decía creo que era el viejo Quijano, que era muy gracioso, a pesar de su adustez. Hubo preocupación, evidentemente. Y gracias a que tanto se habló de preservar, por lo menos ahora el ferrocarril no viene por el borde, por el único trozo donde la gente todavía puede estar próxima en aquel parque Capurro seccionado durante la dictadura para hacer las nuevas trazas. De todas maneras me parece que lo lógico era pensar con un criterio, como nos enseñó Seregni, con su sentido estratégico, seguramente por su formación militar, aquel sentido de responsabilidad. Y tecnológicamente un hombre muy respetado incluso por aquellos que no lo podían soportar porque eran muy contrarios a su ideología.
EC —¿Por qué cita a Seregni?
MA —Porque es un hombre de prestigio a nivel de nuestra fuerza política.
EC —Pero en este tema.
MA —Porque nos enseñó que había que pensar las cosas para el largo tiempo, con sentido estratégico.
EC —¿Acá se está resolviendo a las apuradas?
MA —Sí, creo que sí, francamente.
EC —Pero se está resolviendo, se lanzó hace pocos días el llamado a licitación. El proyecto y el tendido ya están definidos. Entonces, ¿por qué insiste con este planteo? ¿Tiene la esperanza de que todavía haya algún espacio para la revisión?
MA —¿Y por qué no? De todas maneras lo importante es tratar de que la gente reflexione con su propia cabeza. Y esto no es que vaya a beneficiar a la gente, yo no estoy pensando en ganar las elecciones, pero sinceramente creo que vamos a ganar las elecciones, lo digo así.
EC —Hay gente en el FA preocupada, que no lo ve tan claro.
MA —Cómo no vamos a estar preocupados, pero quisiera ganar por méritos propios y no de pronto por insuficiencias ajenas. Y me gustaría que los méritos propios fueran considerados en el mediano y largo plazo como las verdaderas opciones más favorables, y no seguir desfigurando algo que desde el punto de vista programático es contradictorio. Las deformaciones groseras que se han hecho en la bahía, que se siguen haciendo… Vayan a la torre de Antel y miren desde el piso 25 lo que hemos deformado esa bahía, que es un espectáculo paisajístico que el propio presidente actual de la Comisión de Patrimonio ha entendido que es el espectáculo más soberbio que tiene nuestro país, y particularmente nuestra ciudad. Y así lo vieron los viajeros incluso del siglo XIX.
EC —Usted vuelve con su planteo público, con esta carta que estamos comentando, quiere que el debate siga. ¿Hay algún canal orgánico donde pueda todavía tramitarse esta polémica? Por ejemplo, ¿qué diálogo tiene con el intendente Daniel Martínez?, ¿qué sabe de la postura de la Intendencia? El intendente era partidario de la solución de Puntas de Sayago.
MA —Completamente.
EC —¿Entonces?
MA —Desde luego que determinadas resoluciones se toman a los niveles institucionales que corresponde. Si tomamos lo que yo entiendo una mala resolución lo lamento muchísimo. Seguiré votando al FA, vamos a decir la verdad, claro y así medio a lo gallego, porque al final de cuentas soy hijo de gallega y además nieto de vascos. Una combinación un poco explosiva, lo reconozco.
EC —En definitiva lo suyo es dejar su conciencia tranquila y seguir fomentando la reflexión.
MA —Seguir fomentando la reflexión positiva.
EC —Pero mucha esperanza no tiene.
MA —¡Cómo no voy a tener esperanza! ¡Claro que la tengo!
EC —Esperanza de que esto se cambie.
MA —Ojalá.
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Transcripción: María Lila Ltaif
