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Entrevista central, viernes 16 de diciembre: Enrique Iglesias

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EC —Pero después hay que negociar, por ejemplo, ese tipo de factores.

EI —Pensando en el mediano plazo, creo que el mundo va a tener que imaginar una nueva Naciones Unidas reformando la actual para dar entrada a esta nueva situación y convivir con los valores. Tenemos que respetar los valores de otros, pero los otros tienen que respetar también los nuestros. Creo que ese tipo de negociación va a ser una cosa de largo plazo, muy complicada. Lo que me preocupa es que están apareciendo ahora estas ideas nuevas que han dicho estos líderes que llegan: “vamos a negociar ojo a ojo, mirándonos”. Está bien, los líderes pueden cambiar las cosas, pero…

EC —La diplomacia presidencial.

EI —Sí, gente fuerte, líderes fuertes que negocian entre ellos, una especie de machocracia. Creo que los organismos internacionales permiten que todos los grandes y los pequeños tengamos algo que decir. Por eso creo en lo multilateral. Ese es uno de los grandes temas que hay que enfrentar, y el comercio va a ser el primero que nos va a presentar las nuevas realidades.

EC —Ubica también en este plano de los desafíos importantes el fenómeno de las migraciones y la reacción en algunas sociedades, sobre todo en Europa, EEUU, a esas migraciones.

EI —El problema de la migración usted lo podría plantear en todos niveles. Un nivel es el nivel que ha sido tradicional después de la Segunda Guerra Mundial, que nosotros lo conocemos muy bien; yo soy inmigrante, soy uruguayo pero vine en un barco. Pienso que esa migración se incorporó a los países, formó parte de los países, son los países. En EEUU, esos 50 millones de latinoamericanos que fueron entrando en condiciones terribles están incorporados a la sociedad, contribuyen. Serenamente se puede ver que forman parte de la gran contribución. España recibió 4 millones de personas en los últimos 20 años que se incorporaron e hicieron posible más trabajo, incluso más hijos, para poder generar fondos en la seguridad social.

El lío lo crean estas corrientes migratorias violentas que son las grandes expulsiones de la guerra. Ahí es más complicado el tema, eso va a haber que administrarlo; se está haciendo en parte, porque uno entiende las reacciones populares que se producen, que existen, son reales. Eso exige una gestión diferente de la que requiere la migración natural, que se va a seguir produciendo en el mundo. Algo se ha hecho, Europa está abriéndose a negociar y a entender que hay un problema de derechos humanos que hay que respetar. Pero yo comprendo la complejidad que tiene. Son dos cosas que no necesariamente requieren las mismas reacciones.

EC —Va a llevar tiempo esto, se ha puesto muy espeso ese tema, con sus repercusiones políticas y en elecciones y en la designación de presidentes y determinadas representaciones parlamentarias.

EI —Lo del Brexit es una decisión por apenas por 1 %. Pero ¿quién votó a favor? La gente mayor; los jóvenes votaron por la permanencia en la Unión Europea. Lo mismo pasa en cierta manera con ciertos planteos en EEUU, la gente joven es más integracionista, es más abierta al diálogo, se han conocido. El programa Erasmus, que manejó cientos de miles de muchachos en toda la región, hace que hoy a la gente joven de Inglaterra no le guste esto que pasó. A mí tampoco me gusta, pienso que es una cosa grave para la Unión Europea, porque significa la salida de Europa de un país muy importante.

Dicho sea de paso, a nosotros nos viene muy mal, porque Inglaterra era la voz abierta negociadora liberal en la mesa de negociación del tratado con el Mercosur. Perdemos un gran aliado, lo que va a hacer más difícil la negociación del Mercosur con la Unión Europea. Saldrá, pero va a ser mucho más complicado que antes.

Yo veo con una enorme pena todo eso. Pero es importante ver la composición de estos movimientos, la gente joven quiere el diálogo.

EC —¿Ahí hay una luz de esperanza, dice usted? ¿Es cuestión de que el tiempo transcurra?

EI —Sí, o que esa gente llegue al poder y sea gobierno, la gente joven.

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EC —¿Qué pasa con Uruguay en este contexto que venía analizando? En el hoy y en el futuro que se viene. ¿Cómo estamos?

EI —Primero, con respecto a estos conflictos el país tiene una gran tradición de haber apoyado y en algunos momentos liderado estos avances del multilateralismo. Por definición, nuestro país, desde siempre, desde que se fundaron las Naciones Unidas, adoptó posiciones vinculadas a un mayor avance de las negociaciones multilaterales. Eso hay que continuarlo, por algo es sede de organismos regionales de integración. Tenemos que continuar en esa política y viendo las realidades, pero sobre todo actuando colectivamente todo lo que podamos.

En otro orden de ideas, tenemos que prepararnos para estas nuevas realidades que mencionamos al inicio de nuestra charla, el nuevo panorama del mercado de trabajo. Se vienen grandes transformaciones que nos van a abrir algunas puertas y cerrar otras. Y el manejo de esas puertas abiertas está muy condicionado a que el país haga efectiva una reforma que tiene que pasar por una educación de calidad para todos, no solamente para un grupito, para todos. Trabajar en las habilidades, lo que los ingleses llaman los skills, que son variados, depende de cómo este mundo está evolucionando. El mundo tiene que prestar atención a este tema, por eso la creación de la Universidad Tecnológica hace mucho sentido, fue una gran iniciativa.

Y en tercer lugar, creo que tenemos que pensar seriamente cómo podemos manejar el estímulo al emprendimiento. Se dice que el 50 % de los trabajos en el mundo que vendrá se van a hacer en la casa, con la computadora. Hay que estimular el emprendimiento en la gente joven, como lo están estimulando los cubanos, que tienen 500.000 cuentapropistas. Un país que parte de un esquema políticamente diferente, sin embargo se dan cuenta de que el mundo que vendrá requiere formar las nuevas generaciones para que sean capaces del emprendimiento. Los grandes avances en la tecnología se deben a gente joven que trabajó por su cuenta. No vamos a tener muchos casos similares, pero sí hay. Entonces yo diría educación de calidad, buscar la forma de profundizar los skills y al mismo tiempo tratar de que el emprendimiento forme parte de una forma de estímulo de la sociedad.

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