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Entrevista del lunes 12 de agosto de 2019: Pablo da Silveira

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EC —Ya se ha trabajado en esa dirección, la desestacionalización.

P da S —Nosotros tenemos una serie de propuestas en las que se ha avanzado poco: el turismo cultural, el turismo de congresos, el turismo natural. Tenemos toda una serie de propuestas muy detalladas, formuladas por gente que conoce bien la industria. Por ejemplo, armar una buena cadena de alojamiento en el hogar, bed & breakfast; lo planteamos alguna vez y algún periodista se lo tomó en broma, pero eso genera una cantidad de ingresos brutal en muchos países del mundo, y además genera ingresos en familias. En familias que no tienen la capacidad de inversión para poner un hotel, para poner un restaurante, pero sí tienen la capacidad de tener una habitación y un baño y cumplir ciertos estándares para que la gente se pueda alojar ahí un par de noches. Eso genera además movimiento por ejemplo en el interior del país. Hay una enorme cantidad de propuestas que se podrían haber hecho hace cinco, diez, quince años. ¿Por qué no lo hicieron?

EC —En economía se hace hincapié en el programa en la necesidad de una regla fiscal, esto ya estaba en el programa de Todos…

P da S —No solo en el programa de Todos; Larrañaga también lo proponía.

EC —Y se mantiene el plan de ahorro en el gasto público de 900 millones de dólares al año. ¿Cómo salir a la cancha con ese tipo de propuestas en un contexto como este en el que nos encontramos, por ejemplo, un contexto en el que le acaba de ir tan mal a Macri en Argentina con las medidas de ajuste que implementó?

P da S —Pero Macri hizo exactamente lo opuesto de lo que proponemos hacer nosotros.

EC —Veamos eso, porque va a ser uno de los temas de discusión. Y después del resultado de este domingo ni le cuento.

P da S —Primera cosa importante: los blancos, que somos nacionalistas, nunca nos identificamos con gobiernos de otros países. Busquen en el archivo a Luis Lacalle pegándose a algún presidente, aunque haya sido muy exitoso, de algún otro país de América Latina o del mundo. Nunca lo hacemos. Nosotros miramos el Uruguay, nuestro centro de gravedad es el Uruguay, creemos que el Uruguay es un país muy especial, con muchas especificidades, y no hay que andar ni copiando ni pegándose a ningún gobierno de ninguna parte del mundo. No lo hacemos. Entonces todas esos intentos de asociarnos con este gobierno o con tal otro son simplemente maniobras electorales que tratan de ponernos donde nosotros no nos ponemos.

Pero además, si uno mira el programa del PN, hablamos de bajar tarifas y Macri las subió; hablamos de bajar el déficit fiscal, Macri no lo hizo, de hecho lanzó un inmenso programa al que se jugó mucho –evidentemente le fue mal– de obra pública que implicaba más gasto y no menos gasto, en las condiciones en las que lo hizo. Macri se jugó todos los boletos a una lluvia de inversiones del exterior que nunca llegaron, nosotros hablamos de la necesidad de gobernar con austeridad, de generar recursos genuinos, frenando el despilfarro, y usar ese dinero para impulsar medidas que puedan reactivar al país. Nunca tuvo nada que ver el gobierno de Macri con lo que nosotros proponemos, y de hecho nos reímos cada vez que nos identifican con Macri, porque basta con mirar con un poquito de objetividad y desapasionamiento la realidad para darse cuenta de que no hay puntos en común. Ni hablar de cuando nos quieren comparar con Bolsonaro, eso simplemente cae en la esfera de lo ridículo.

EC —Está claro que usted es doctor en Filosofía y no economista, está claro que el nombre referente en economía es Azucena Arbeleche. De todos modos, quiero hacerle por lo menos una pregunta en esta materia, porque usted señalaba más temprano “nos resistimos a manejar números mágicos”, incluso apoyándose en el antecedente de lo que fue la campaña electoral de hace cinco años del FA, en la que se hicieron una serie de promesas que después no resultó fácil cumplir o directamente no se cumplieron. Sin embargo hay algún “número mágico” como este de los 900 millones de dólares de ahorro. El FA ha cuestionado por todos lados ese plan, ese proyecto, el realismo de un objetivo como ese. El último fue el contador Astori, el ministro de Economía, cuando estuvo el jueves pasado aquí en En Perspectiva.

(Audio Danilo Astori.)

Las medidas que proponen desde esas tiendas políticas son absolutamente irrealizables. Porque están proponiendo una rebaja del gasto de 900 millones de dólares, achicando retribuciones personales, servicios no personales. Pero en todo caso, incluso partiendo de números equivocados, porque gran parte de los vínculos laborales que han aumentado en los últimos tiempos en el Estado son los que se refieren a educación, salud y seguridad, el propio programa de ese sector político establece, si no me equivoco, que esos incrementos se van a respetar. Por lo tanto, si se respetan esos incrementos en tareas prioritarias como las que acabo de mencionar, es absolutamente imposible –no tengo los números acá pero los hice– ahorrar 900 millones de dólares.

(Fin audio.)

EC —A cuenta de una discusión más a fondo con la economista Arbeleche, ¿qué dice usted?, ¿cómo han analizado este tipo de respuestas que han tenido?

P da S —En esas palabras el ministro Astori dice dos cosas que son falsas. La primera es que nosotros proponemos ahorrar 900 millones de dólares solamente por el terreno de la eliminación de vínculos laborales. Ese es solo uno de los varios rubros en los que proponemos generar economía.

EC —Tengo acá el texto, en ese rubro anuncian un ahorro de 100 millones de dólares por año, que se va acumulando y a lo largo de cinco años son 500 millones.

P da S —¿Qué le parece? Bajamos de 900 millones a 100 millones cuando hablamos de lo que habla el ministro Astori. El ministro Astori es un hombre muy inteligente, no es que no se dio cuenta, es que está muy nervioso. Por eso está deformando lo que decimos, tratando de caricaturizarlo, pero lo que decimos no es lo que él dice que decimos.

EC —Ustedes anuncian no cubrir anualmente el 21 % de las vacantes.

P da S —Ese es solo uno de cinco rubros en los que proponemos generar ahorros. Y después [Astori] dice una cosa muy curiosa, dice que los números están mal porque no tenemos en cuenta que muchos de esos cargos son en educación. Pero entonces no es que los números estén mal, eventualmente dirá “no tienen en cuenta cómo se distribuyen esos números”. Los números están muy bien. Y es raro que el ministro Astori hable de números que están mal, porque hace una década que viene errándoles a todos los números, a los números de inflación, a los números de déficit fiscal, a todo lo que usted quiera. Nuestros números están bien, ministro Astori. Lo que proponemos es un abanico de medidas muy amplio, y no es un número mágico porque es un número muy conservador. Estamos seguros de que eso se puede hacer sin que el Estado deje de cumplir ninguna función importante. Ese número es algo así como la medida del despilfarro más evidente que está ocurriendo hoy en la órbita del Estado. Pensamos que se puede ahorrar más, no lo decimos justamente porque no queremos comprometernos con números que pueden ser más vistosos. Pero además es interesante ver que en otras tiendas se llegó a números parecidos.

EC —Ahí alude al programa de Ernesto Talvi, por ejemplo.

P da S —Por ejemplo. Quiere decir que entonces nos equivocamos todos, menos el ministro Astori, que no viene embocando una cifra desde hace un montón de años. Es un poco curioso. Creo que el debate hay que tenerlo con seriedad, y la primera parte de un debate serio es tomarse en serio lo que dice el otro y no deformarlo. Y discutir lo que dice el otro, no discutir una versión caricaturesca de lo que dice el otro, que es lo que está haciendo el ministro Astori.

Pero además me importa decir otra cosa. Cuando el ministro Astori sale con estas posiciones o cuando sale Mario Bergara, como salió en las últimas horas… Mario Bergara es responsable del crecimiento del déficit fiscal en un 1 %, que es un montón de plata, es lo que aumentó el déficit fiscal mientras Mario Bergara fue ministro de Economía.

EC —Está hablando del período de gobierno anterior.

P da S —Sí. Cuando usted escucha a estas figuras del oficialismo atacar las medidas de austeridad, hablar como si fuera un disparate intentar controlar las cuentas públicas, hay que tener claro que esa actitud significa más impuestos, más tarifas altas, más déficit fiscal, más aumento de la deuda. Que es lo que ha hecho el FA en todos estos años. Y fíjense además en una situación curiosa: en todos estos años, hasta hace poco, la recaudación fiscal en Uruguay creció ininterrumpidamente y alcanzó valores que no se conocían en la historia del país, sin embargo año tras año el FA gastó más de lo que recaudaba.

EC —Lo que el ministro de Economía dice ahora es que en la óptica del FA la reducción del déficit fiscal –que hay que hacer, porque él no está conforme con los números de déficit fiscal de hoy– se va a lograr por la vía del crecimiento de la economía, para lo cual se han tomado medidas, y sobre todo atacando los problemas que hay en seguridad social, el gasto en seguridad social y en la caja militar.

P da S —Tuvieron más de una década de crecimiento constante de la economía, y en lugar de reducir el déficit fiscal lo aumentaron. ¿Por qué ahora va a ser diferente? Expliquen. Ojalá tengan ideas, pero no han propuesto una sola idea que demuestre que van a hacer las cosas de otra manera respecto al pasado. Y lamentablemente ahora la economía se ha enfriado, cosas que están pasando en la región, como lo de Argentina, traen incertidumbre, ya hoy hay expertos en el sector turismo que dicen “cuidado”, porque con esto es probable que la próxima temporada turística en Uruguay no sea buena. Quiere decir que vamos a estar en un escenario más complicado que en los últimos años. Entonces el FA, que no consiguió reducir el déficit fiscal cuando aumentaba la recaudación, ¿cómo va a hacerlo cuando la recaudación probablemente no aumente y cuando los niveles de actividad no sean, como ya no son, los que eran hace algunos años? Creo que las principales figuras del FA, en lugar de caricaturizar y deformar lo que otros estamos proponiendo, deberían explicar de qué manera van a hacer las cosas diferente de cómo las han hecho hasta ahora.

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