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Entrevista del jueves 17 de octubre de 2019: Robert Silva

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EC —Robert Silva tiene 48 años y es profesor… ¿de qué materia?

RS —Soy egresado del INET en Administración y Servicio, y como fue en el marco de un plan que tomaba como base la formación universitaria, soy abogado, soy profesor de Derecho en las áreas de administración, en cursos terciarios, últimamente trabajé en los cursos de rematador y de corredor inmobiliario, que son cursos terciarios en la escuela del Prado. Trabajé hasta julio de este año, trabajé en forma honoraria desde febrero de 2016, cuando asumí como consejero, hasta ahora, porque creí importantísimo no alejarme del aula y del contacto con mis colegas.

EC —Desde febrero de 2016 integraba el Codicen (Consejo Directivo Central de la ANEP) en uno de los dos puestos de consejeros elegidos por los docentes. Dejó el cargo en julio cuando asumió esta responsabilidad, cuando recibió el ofrecimiento de la candidatura a vicepresidente de parte de Ernesto Talvi.

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EC —Hace algunas semanas Talvi mantenía distancia ante la posibilidad de acordar una coalición de gobierno con los partidos nuevos, CA y el Partido de la Gente (PG). Ahora parece aceptar ese camino, simplemente acota que primero hay que esperar la elección para conocer cómo son los pesos relativos de cada uno de ellos en el Parlamento. ¿Por qué se dio esta flexibilización?

RS —Nosotros apostamos desde un primer momento al fortalecimiento de los partidos que tenemos mucha historia, mucha tradición en la construcción de esta República, y a los partidos que también ya tienen una historia, que ya se conocen, como el Partido Independiente (PI), y formar una coalición de gobierno, porque decíamos y decimos que cuando esa coalición está integrada por un número determinado de personas, dos, tres, es más fácil acordar para llevar adelante las políticas públicas en las distintas áreas. La realidad ha cambiado, según lo que dicen los estudios, hay que esperar a la gran encuesta que va a ser el 27 de octubre, que nos va a plasmar la realidad, pero no hay que negar que ha surgido un partido que es CA, que aparentemente va a tener una bancada importante.

EC —Pero independientemente de la bancada está aquella frase de Talvi de que de Manini lo separaba un océano ideológicamente, etcétera.

RS —Las diferencias siguen existiendo, luego de las elecciones habrá que conversar sobre cuestiones específicas en el marco del proyecto de país que triunfe. En esa próxima coalición de gobierno, como marcan las encuestas, va a haber un partido que va a tener la cabecera de la mesa, que nosotros aspiramos a que sea el PC y Ernesto Talvi. Pero si no lo somos, nos vamos a integrar ahí. El que tenga la cabecera va a tener un proyecto, presentará ese proyecto con sus distintas dimensiones, con las acciones en las distintas áreas de gobierno y tendremos que acordar.

EC —Ayer Lacalle Pou fue terminante: en caso de que él pase a la segunda vuelta, después de la primera vuelta, va a ir en busca de una coalición de gobierno con varios partidos, y los mencionó expresamente para que no hubiera dudas: PN, PC, PI, CA y PG.

RS —Creo que no tenemos que negarnos a conversar con nadie, Ernesto Talvi nunca se negó, lo que dijo fue que quería esperar a la elección. Yo digo: comparto la visión de que si la gente les da representación en el Parlamento nacional a distintos partidos, vamos a tener que reunirnos con todos esos partidos que tienen un proyecto de país distinto del que hoy nos gobierna para tratar de encontrar acuerdos de cara al futuro.

EC —¿Ahora ustedes entienden que las diferencias ideológicas, programáticas con CA son menores de las que en principio veían?

RS —No, no. Creo que Ernesto estuvo acertadísimo, porque incluso ameritó una aclaración del candidato de CA, por ejemplo cuando planteó el tema de la inmigración, de los inmigrantes, aquello de ciudadanos de primera, ciudadanos de segunda. Me pareció muy bueno que lo hiciera porque es bueno plantear esas cuestiones, ponerlas sobre la mesa: yo estoy de este lado, el otro está en otro lado. Lo mismo sucede con la cuestión de la democracia; personalmente ratifico esos dichos, creo que nuestra democracia goza de muy buena salud, que tenemos un sistema político que funciona muy bien, tenemos partidos políticos y hay que fortalecer los partidos políticos. Pueden continuar existiendo esas diferencias, pero en el momento de adoptar políticas públicas habrá que ver cuáles son los acuerdos a los que se puede arribar.

EC —Esta semana el expresidente Sanguinetti, líder de la corriente Batllistas del PC, hizo dos jugadas que llamaron la atención. Primero dijo que ahora ve con simpatía la reforma constitucional Vivir Sin Miedo de Larrañaga, que antes rechazaba, y ayer asistió al almuerzo de ADM en el que exponía Luis Lacalle Pou como uno de los presidenciables. ¿Cómo observó esos dos movimientos?

RS —Hay una realidad con la reforma –por haber recorrido todo el país hablo con propiedad–: la gente pide la papeleta. Esa es la verdad.

EC —¿Se la piden a usted, por ejemplo?

RS —La gente nos pregunta nuestra posición respecto del plebiscito…

EC —La de Talvi, la del sector de Talvi es claramente no.

RS —Y la del partido en general, la posición adoptada por el partido es dejar en libertad de acción a nuestros votantes y es lo que explicitamos. Pero los compañeros, los dirigentes, los militantes del interior nos dicen que la gente está pidiendo la papeleta y de hecho muchos sectores del partido la están entregando. O sea que creo que lo que ha hecho uno de los sectores ha sido constatar una realidad y proceder en consecuencia. Lo que no cambia, porque creo que el propio expresidente Sanguinetti ha dicho que él todavía no ha tomado la decisión, que él no apoya…

EC —Todavía no la tomó, va a comunicar qué es lo que piensa exactamente la semana que viene. Todo indica que encendió el señalero y que va a terminar pronunciándose a favor, está generando un margen de tiempo.

RS —Puede ser, veremos qué resuelve. Nosotros seguimos con la posición primero de la libertad de acción y luego en lo personal ni Ernesto ni yo vamos a acompañar el plebiscito.

EC —¿Así que a usted, después de que explica que no está a favor, igual le piden la papeleta?

RS —Sí, porque hay un tema que cachetea a los uruguayos y golpea. El otro día en un pueblo de estos que he ido –siempre digo que digo pueblo porque soy un tipo del interior y sé que cuando uno dice pueblo es en sentido cariñoso– una señora, una jubilada, me dijo: “Estoy contenta, porque ¿sabe qué?, después de que ahorré pude poner la última reja en la ventana que me faltaba”. Eso es la demostración cabal del fracaso estrepitoso que ha tenido el gobierno en la política de seguridad. La gente está harta, está cansada, está atemorizada en muchos lados. Y quien dice que no es porque no recorre el país y no conversa con la gente lo que le pasa permanentemente en materia de seguridad. Entonces la gente ve esta medida del allanamiento nocturno y todas estas cuestiones –porque mirá que las bocas de droga que llevan a distintas situaciones que llevan tanto mal a nuestras familias están en las esquinas de muchos lugares– como un instrumento más para tratar de encontrar una solución.

EC —¿Usted qué contesta cuando le piden la papeleta?

RS —Digo que nosotros somos el partido de la libertad y por lo tanto creemos que lo más importante que tienen que tener las personas es la libertad individual y colectiva de llevar adelante lo que creen que es lo mejor. Les doy mis argumentos, y si creen que es lo mejor, están en el ejercicio de la libertad que históricamente hemos defendido.

EC —Pero la lista 600 en particular no va a ensobrar.

RS —No. Es lo que hemos estado conversando últimamente. No ensobra.

EC —¿Y la otra novedad, el otro gesto de Sanguinetti, esto de que haya participado ayer en una de las mesas más visibles cerca del escenario en el almuerzo de ADM donde hablaba Lacalle Pou?

RS —Me parece muy bien. El presidente Sanguinetti ha apoyado desde un primer momento, desde que Ernesto Talvi ganó la elección interna, la conformación de la fórmula en primer lugar y luego las acciones que se han venido desarrollando, y tenemos un partido que está unido. Yo me siento muy contento de eso, porque una de las cuestiones que se me dijeron cuando se me ofreció la candidatura fue “tú sos prenda de unidad”, y he tenido gratísimas sorpresas, sobre todo con tus colegas del interior. Muchos de ellos me dicen que hace muchos años que no veían a todos los candidatos y los sectores del partido concurrir a una entrevista con un candidato nacional. Eso está pasando en todo el país, tenemos un partido unido, que está trabajando muy bien, que está encolumnado tras un proyecto y con fuerte vocación de construir política pública de futuro. Creo que el presidente Sanguinetti asiste a estos lugares además en su calidad de expresidente de la República.

EC —Sí, pero una de las lecturas es: ya está, Lacalle Pou es el candidato de la oposición y ahí va Sanguinetti a respaldarlo.

RS —No, no, francamente no, porque converso con Sanguinetti. Sanguinetti no es una persona que cuelgue la toalla; al contrario, fijate que con 83 años fue uno de los componentes para recuperar al PC.

EC —Pero veamos lo que dijo Lacalle Pou cuando vio que estaba allí: “Permítanme agradecerles especialmente al doctor Julio María Sanguinetti y a su señora, Marta Canessa. No hay duda de que el hombre es baquiano y sabe que algunas sutilezas generan señales que son muy esperadas”.

RS —No voy a interpretar lo que quiso decir Lacalle Pou porque eso lo explicita él, que es dueño de sus palabras y de sus dichos, obviamente. Pero sí quiero rescatar que Sanguinetti desde un primer momento ha estado hablando de la necesidad de una coalición y ha implantado el tema en la discusión pública. Quizás hubo una diferencia porque Sanguinetti decía que había que tener algunos acuerdos antes de las elecciones y Ernesto Talvi dijo después de las elecciones. En definitiva estamos todos caminando hacia después de las elecciones porque tenemos que diferenciarnos, el PN no es lo mismo que el PC, somos bien distintos. Entonces la señal que puede haber dado Sanguinetti es decir “acá hay un expresidente de la República que encabeza una lista al Senado que está dispuesto a acordar”. Pero Sanguinetti está trabajando arduamente para que Ernesto Talvi y el PC esté en el balotaje, me consta, converso con él, recorre el país y ese es su discurso y su trabajo.

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