EnPerspectiva.uy

Entrevista del viernes 18 de octubre de 2019: Ramón Méndez

Facebook Twitter Whatsapp Telegram

EC —Hay mensajes de los oyentes. Por ejemplo, a propósito de números que usted manejó, dice Eduardo: “¿50.000 puestos de trabajo en el sector de las energías renovables? ¿No es una exageración? ¿Hay gente empujando las aspas de los molinos?”.

RM —Sí, soplando de abajo. Hay estudios que lo prueban, no es un número tirado al azar. Quiero aclarar que esto fue durante el proceso de la transformación, no ahora, ahora las operaciones son menores. Pero no solamente la energía eólica, alrededor de la biomasa se generan una enormidad de puestos de trabajo, porque va desde la logística de transformar un residuo forestal o industrial para llevarlo a la planta de biomasa, al mantenimiento, al desarrollo de las calderas. Hubo cientos de millones de dólares de inversión solamente en ese tipo de cosas.

***

EC —Hablemos de gobernabilidad. A partir de las encuestas, a partir de los análisis, parece muy difícil que el FA obtenga mayoría propia en las elecciones del 27 de octubre. Entonces, si Martínez ganara en la segunda vuelta, ¿cómo haría para gobernar? Porque estos planes que usted está anunciando tienen que llevarse a la práctica.

RM —Empiezo por el final de la pregunta. Muchas de estas cosas son decisiones del Poder Ejecutivo. Por ejemplo, el hecho de utilizar 120 millones de dólares de las utilidades del BROU para desarrollar la transformación o redirigir los fondos del Inefop para la capacitación es simplemente utilizar dineros existentes en el marco de las leyes vigentes. La reorganización del funcionamiento del Estado y de los fondos públicos es una cuestión que puede hacer directamente el Poder Ejecutivo. Simplemente para quitar un poco de dramatismo al tema.

Daniel tiene mucha experiencia en esto de trabajar, es una persona de diálogo, es una persona que genera empatías y que genera búsqueda de consensos y de acuerdos. Voy a dar ejemplos, no simplemente hablar en el aire. Como intendente de Montevideo tuvo que enfrentar algunas votaciones que exigían mayorías especiales, de por lo menos 21 votos, para muchas decisiones importantes que se tomaron en la Intendencia, desde el Fondo Capital hasta el reanálisis del Hotel Carrasco, hubo una cantidad de temas en los cuales se precisaban mayorías especiales. Rara vez obtuvo 21 votos, en general tuvo 27, 28, 29 sobre los 30 ediles entre gobierno y oposición. Es decir, es una persona que sabe construir acuerdos, que lo hizo cuando fue intendente, que aparte tiene una experiencia vastísima tanto en el ámbito privado como en el público, que fue presidente de la principal empresa de nuestro país, que fue sindicalista y creador de la Comisión de Ciencia y Tecnología del PIT-CNT…

EC —Pero ¿con quiénes acordaría? Porque las distancias con la oposición son enormes.

RM —Dos cosas. En primer lugar, ¿qué dicen los números? Hoy está lejos de ser descartable que el FA pueda tener el 43 % de los votos. Con el 43 % de los votos ya puede tener mayoría absoluta en el Senado, porque con el 43 % de los votos el Frente obtiene 15 senadores y más el vicepresidente son 16. Eso ya da mayoría absoluta en el Senado.

Por otro lado, con 43 % de los votos ya alcanza para tener 45 o 46 diputados, con lo cual eventualmente o con grupos, va a depender de cómo se reparta el Parlamento, se puede llegar a armar acuerdos con sectores que tengan uno o dos diputados.

Se pueden armar acuerdos globales con una participación de algunos otros partidos en el gobierno, como también pueden armarse acuerdos puntuales, que son más costosos, que llevan mucho más diálogo, pero son los más interesantes, porque son aquellos en los que decimos: a ver, podemos tener diferencias en una cantidad de cosas, pero en lo que tenemos acuerdos ¿estamos dispuestos a trabajar para el país, a remangarnos? Sin duda es diferente de lo que pasó en estos años, pero es perfectamente posible. Y si hay alguien que puede hacer eso, es Daniel Martínez, no hay ninguna duda de que sus características de diálogo, de generación de acuerdos es única en este país.

EC —¿A quiénes identifica como cercanos o más cercanos?

RM —Identificamos a varios de los partidos.

EC —Usted mencionó a Talvi al pasar hace un rato.

RM —Sin ninguna duda.

EC —¿Con Talvi habría acuerdos posibles?

RM —No tengo ninguna duda de que con Talvi hay acuerdos posibles, con sectores del PC, sí, claro que hay acuerdos posibles. Por supuesto.

EC —¿Con sectores del PN?

RM —Capaz que es más difícil.

EC —¿Con el PG?

RM —No tengo ninguna duda, el PG dio votos decisivos para que Montevideo pueda estar en obras como está en este momento.

EC —¿Con el PI, que ha sido tan crítico, tan duro en las denuncias a propósito de los gobiernos del FA y los casos de corrupción, etcétera?

RM —Ni que hablar. Y bienvenidas las críticas, por supuesto. Acá tenemos que separar lo que aparentemente son enojos o cuestiones personales. ¿Vamos a olvidar que Pablo Mieres votó prácticamente toda la agenda de derechos que quiso llevar adelante el FA? De que hay puntos de acuerdo con Pablo Mieres nadie puede dudar; que después su estrategia política o sus enojos personales, que son todos legítimos, hayan llevado a otras decisiones, puede ser, pero la política es el arte de hacer posibles las transformaciones.

EC —¿Y Cabildo Abierto (CA)?

RM —Con CA sin lugar a dudas es mucho más difícil. Estamos viendo lo que está pasando al revés. Creo que la enorme dificultad –es lo que nos dice la gente en la calle– va a ser para Luis Lacalle Pou para armar un gobierno. Fijate lo que le pasó el otro día, por ejemplo: de mañana está diciendo en ADM –me imagino que lo tiene acordado con Manini Ríos– que no es cierto que hay un déficit de la caja militar, y después se tiene que reunir con los familiares de desaparecidos. Hay unas tensiones, unos intríngulis. Y fijate lo que le pasa a Talvi: recordarás que hace dos meses en el programa Séptimo día le preguntaron específicamente “¿de quién se siente más cerca, de Manini Ríos o de Daniel Martínez?”, y sin titubear dijo “de Daniel Martínez me siento más cerca”. En este mismo programa Talvi dijo que de Manini Ríos lo separaban océanos, esa fue la expresión que usó. Entonces me imagino las tensiones que debe estar sufriendo la interna del PC para dejarse de embromar con esas cosas y decir que va a apoyar a Manini. Es muy complejo, muchísimo más complejo lo que está pasando ahí adentro. La famosa ley de urgencia, que seguimos sin saber exactamente lo que va a tener: ahora Lacalle está diciendo que en realidad no sabe qué va a tener porque ya el PC o, ni que hablar, Manini le dicen muchas de las cosas que no le llevan más de la mitad de las cosas que quiere llevar adelante.

Comentarios