EnPerspectiva.uy

Entrevista, lunes 18 de junio: Milton Machado

Facebook Twitter Whatsapp Telegram

EC —Tengo una cantidad de mensajes de oyentes. Varios de ellos preguntan cuánto cuesta conectarse al saneamiento, cuánto cuesta la conexión, esa que ahora está exonerada, que por ahora en el caso de Ciudad de la Costa está exonerada.

MM —La conexión por decreto tarifario anda en $ 18.000, $ 19.000. Esto es porque se promedia en los distintos lugares la reposición del pavimento. Principalmente los colectores están en la mitad de la calle, entonces hay que romper para llegar al colector, que es la parte de que hace OSE, vereda, calle y después hay que reponer todo eso. Es un promedio, hemos estado estudiando para diferenciar en lugares donde hay pavimento de hormigón o asfálticos podría tener un costo menor.

EC —¿y cuánto puede costar la obra interna de la casa para conectarse al saneamiento?

MM —Ahí está el tema, depende de dónde esté el pozo negro. Ahí también es parte de las dificultades de por qué la gente no se conecta. Si uno tiene un pozo negro atrás de una casa, tiene que venir con distintas cámaras cambiando de dirección hasta llegar a la línea de propiedad adelante. Ahí son varias cámaras con varios metros de tubería, en Ciudad de la Costa. Pero en terrenos de 40 metros de fondo, como hay principalmente, son unos cuantos metros con unas cuantas cámaras. El que tiene el pozo negro adelante para conectar más próximo anda en el orden de US$ 1.000, unos $ 30.000. A partir de ahí se suma. Si tiene que pasar por algún pavimento donde tiene un parrillero, donde tiene un garaje, lo que sea, hay que romper y reponer. Esos son todos costos extra que tal vez sea una de las razones de por qué la gente demora o se duerme para hacer la conexión intradomiciliaria.

***

EC —Una parte de las piezas de la campaña de bien público que ha estado difundiendo Presidencia de la República está referida a saneamiento, la otra parte se concentra en el agua potable, la importancia del agua potable, el cuidado que hay tener de ella. ¿Por qué son necesarias estas comunicaciones?

MM —Porque es bueno mantener un nivel de información, pero también de concientización y de sensibilidad respecto a todo el tema del agua potable. El otro día se cumplía el tema del medioambiente y esto está muy vinculado, lo que hace el ciclo del agua, cómo usamos el agua, los usos responsables del agua. OSE ha hecho algunas campañas, en la administración anterior principalmente, de uso responsable del agua, del uso de un bien público, como está orientada esta campaña. Creo que además lo bueno de esta campaña que hace Presidencia con el Mvotma, con el Poder Ejecutivo, es informar y que la gente conozca lo que se ha hecho en todo el medio rural. Es una obra que empezó en 2009 el proyecto de pequeñas localidades y escuelas rurales para llevar agua potable principalmente a la escuela rural como el centro social y después se construyeron tuberías a los pocos hogares. Estamos hablando de 15, 20 viviendas alrededor de esa escuela aisladas en el medio del campo. Son obras difíciles, que no son para nada rentables para el organismo. Ahí como que paso un aviso, eso se puede hacer porque tenemos una empresa pública monopólica del Estado que de acuerdo a las políticas de subsidio cruzado que tiene los lugares que son superavitarios puede subsidiar y financiar estos lugares que son deficitarios. Si no nunca se harían, porque son obras que nunca van a rendir llevarles el agua potable en medio aislado rural a 20 familias. Acá se logró una mejora en la cobertura del orden de 20.000 habitantes, 6.000 hogares en 320 escuelas rurales que se llevó el agua potable y para OSE le queda un nuevo servicio instalado que tiene que monitorear permanentemente.

EC —Varios de los mensajes enfatizan en la necesidad, la conveniencia de cuidar el agua potable, de no desperdiciarla. ¿Qué ocurre con OSE misma, porque OSE produce agua que después se pierde por roturas de caños u otros desperfectos?

MM —Yo sabía que esta pregunta iba a llegar.

EC —Una de las notas de prensa que recogía de estos días, una que se publicó en Correo de los Viernes recuerda que el propio organismo, OSE, ha informado que entre pérdidas por roturas de cañerías, falta de contadores o sustracción ilegal, se desperdicia casi el 40 % del agua que se potabiliza. ¿Ese número sigue siendo correcto?

MM —Sí. Ahí hay que diferenciar lo que son pérdidas físicas y pérdidas aparentes o pérdidas comerciales. Hay un número que ronda el 50 % en el global, pero de ese 50 % el 70 % son pérdidas físicas, estamos hablando de un 35 % del agua que se pierde principalmente por roturas. Ahí está muy asociado a las inversiones en décadas que se dejaron de hacer para sustituir tuberías. Son inversiones muy importantes que se precisan, el organismo viene trabajando ya hace años en mejorar lo que son nuestros índices RANC (reducción de agua no contabilizada) que tiene todos estos componentes de mejorar la infraestructura instalada, porque hay infraestructura que ha cumplido su vida útil y hay que sustituirla, con todo lo que implica, pero además tenemos un trabajo intensivo en lo que se puede atacar respecto a la parte comercial, conexiones clandestinas, fraudes. Y después hay un porcentaje de esa agua, que no se contabiliza pero también lo tenemos macromedido y sabemos cuánto es, que son asentamientos y lugares donde cumpliendo con el acceso al agua como un derecho humano fundamental, que dice el artículo 47 de la Constitución, lo que vamos haciendo es tener un programa de regularización de esos asentamientos que progresivamente podamos integrarlos y formalizar esos hogares para que estén en el sistema comercial formal. Es todo un trabajo, una planificación.

EC —¿Qué mejoras ha habido? ¿Puede mencionar números que marquen una evolución positiva en este rubro pérdidas?

MM —Podemos decir que se viene trabajando, se mueve poco la aguja, eso hay que reconocerlo, tenemos una debilidad allí y un desafío muy importante en mejorar, pero venimos haciendo inversiones muy importantes donde sustituimos en el orden de 180 a 200 km por año de tuberías, sustituimos 80.000 medidores por año para tener una precisión en la medida, porque una adecuada medida redunda en una adecuada facturación y que el usuario tenga la certeza de lo que se le cobra el consumo de agua correctamente medida. Y después se está trabajando con nuevas tecnologías principalmente lo que llamamos distritos de edición y control, donde se toma un barrio, se toma un área y allí se maneja la red hidráulica con reguladoras de presión para bajar las presiones en la noche, o sea, a menor consumo bajamos las presiones para que haya menor cantidad de roturas. Esto tenemos distintas obras en todo el país de acuerdo a algunos índices que venimos manejando y tenemos todo monitoreado con indicadores. Hay un compromiso con la OPP y con el gobierno nacional, esto también nos lo controla el Ministerio de Economía, a los efectos de ver cómo viene OSE con el compromiso de ir avanzando en esos indicadores. Allí también está involucrado, por el sistema de remuneración variable, el sindicato participa de la gestión con esos indicadores para poder cumplir mejoras en la gestión del organismo.

Comentarios