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Entrevista, martes 17 de abril: Richard Read

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EC —Usted lo mencionó, toda una línea de trabajo de la FOEB es la creación de estos centros de apoyo a escolares que surgieron de la negociación colectiva.

RR —Son centros sociales y educativos. Son parte de una negociación mucho más extensa. Esto se concreta en el 2015, pero en el 2012 habíamos intentado trabajar por un liceo de la Federación que fue bombardeado a los 10 segundos…

EC —Sí, porque de algún modo seguía el modelo del liceo Impulso, del liceo Jubilar, etcétera.

RR —Sí, sí. Esa tribuna que cobra al grito o está de acuerdo o te mata en dos minutos. Ese liceo quedó en el camino. ¿Está congelado? No, está en standby, en algún momento lo vamos a volver a traer.

EC —Lo van a volver a poner en el tapete.

RR —Sí, lo vamos a traer. La idea para el año que viene es una escuela de oficio, que tenga una mixtura de aprender oficio y también obviamente algunas materias que le den al botija proyección para poder desenvolverse.

EC —Van a parecerse al centro educativo Los Pinos.

RR —Yo reivindico Los Pinos, voy cada tanto a dar charlas allí. En Los Pinos hay 580 gurises de la zona que si no fuera por Los Pinos no tendrían otra alternativa. Hay que ver esa realidad.

EC —Mencioné Los Pinos, pero podría mencionar a Tacurú también y estamos hablando casi de la misma zona.

RR —Sí, es prácticamente de la misma zona.

EC —Tiene más historia aún.

RR —En el 2015 la idea nuestra era: de qué manera devolvemos –esto fue una idea de Fernando Ferreira, el compañero que está hoy en el PIT-CNT por la Federación– a la sociedad lo que la sociedad nos ha dado en esa cantidad de conflictos que hemos ganado todos y siempre la sociedad de acuerdo y apoyándonos. Siempre tuvimos una práctica sindical de no ponernos en contra a la sociedad, al consumidor, al boliche chico. Por lo tanto pensamos en los niños, pensamos en un CAIF, pensamos en un club de niños, en una guardería. Fueron fracasando porque no encontrábamos eco, los números no cerraban, hasta que dijimos “hagamos algo por la cuenta”. Habíamos ido a Los Pinos, Los Pinos en parte inspirador del trabajo comunitario en el barrio. Y dijimos “hagamos algo parecido”, no igual porque no puede ser igual, pero parecido. El tema está señalado hacia los chiquilines de cuarto, quinto y sexto, en el contrahorario. El requisito es que vayan a la escuela. Van de mañana a la escuela, los recibimos después del mediodía; van de tarde, los recibimos de mañana. ¿Qué se necesita? La gran pelea contra la esquina, contra la calle, contra el ocio, contra el narco, contra la vida fácil, contra la pérdida de hábitos, sacarles hábitos.

EC —Hay que sacarle botijas a la esquina.

RR —Sacarle botijas a la esquina dice Pablo Bártol, y creo que es una frase bien gráfica. Lo creímos, empezamos a trabajar sobre eso y dijimos ¿y qué hacemos?

EC —Primer detalle, ¿cómo se financia? Y lo metieron en la negociación colectiva.

RR —Está en el consejo de salarios. Uno va al grupo 1, Alimentación, grupo Bebidas y ahí está. Ahí están los números, ahí está la plata.

EC —Eso quiere decir que la empresa pone plata…

RR —No, pone plata el consejo de salarios.

EC —¿Cómo es eso?

RR —Es una negociación del consejo de salarios, y en el consejo de salarios resolvimos que el destino del dinero que pone la empresa fuera acá; podía tener otro destino. Es dinero que está en el consejo de salarios.

EC —Podía haber tenido como destino…

RR —Al bolsillo de uno puede ir.

EC —Podría decirse que es dinero que sacrifica el trabajador de la bebida.

RR —Yo creo que aporta el trabajador de la bebida.

EC —Pero que podía estar en el bolsillo del trabajador de la bebida.

RR —Yo te pongo el otro medio vaso. Con mucho gusto aportamos para que haya un beneficio de solidaridad para chiquilines que de otra manera no tendrían nada. Pero ese dinero es mucho dinero.

EC —¿Cuánto es por año?

RR —El último aporte, que fue en febrero, anduvo cerca de los $ 15 millones.

EC —¿De un año?

RR —Sí, son tres años, esa plata después hay que administrarla para los años siguientes. Lo primero que dijimos después de que se aprobó fue “esto está bárbaro, pero las empresas tienen que auditar”, tiene que haber una auditoría de las empresas monitoreando adónde va el dinero. Que no, que sí, que nos corresponde, que no nos corresponde; no interesa, tiene que haberla. Entonces cada seis meses hay una auditoría del sector empleador, del centro de fabricantes. En las dos presentaciones que ya se han hecho los resultados fueron excelentes, ha sobrado dinero en cada uno de los balances, por lo tanto la administración es válida, transparente y es posible hacerlo.

EC —Los botijas reciben apoyo en matemáticas, comprensión lectora, gramática, inglés, robótica, ajedrez, actividades deportivas, cultivo de huertas.

RR —Cultivo de huerta y cocina.

EC —Y por otro lado se les ofrecen transporte, uniformes, útiles, desayuno y merienda.

RR —Y los deberes, todos salen con los deberes hechos. Hoy tenemos alrededor de 270 chiquilines, unos 268.

EC —¿Cuántas horas están por día?

RR —Cuatro horas, de 13 a 17 y de mañana hasta las 12.

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