EnPerspectiva.uy

Entrevista, miércoles 23 de mayo: Marta Jara

Facebook Twitter Whatsapp Telegram

EC —Uno de los proyectos que impulsa la fundación al frente de la cual se encuentra es la producción de gas a partir de algas en la profundidad del océano.

MJ —Hablamos de eso también. Hablamos de las posibilidades de generar hidrógeno distribuido a partir de excedentes de energía eólica… Son todas cosas que hay que poner en cartera y pensar y prepararse para el futuro.

EC —Pero no fue el único, hubo varios expositores. Por ejemplo, estuvo también el brasileño Bernardo Ferreira, de McKinsey & Company, que habló sobre los desafíos de la movilidad y la revolución que atraviesa la industria automotriz. Expuso sobre movilidad colaborativa, vehículos autónomos, nuevos modelos de vivir el transporte en las ciudades, “un modelo en el que pagaremos por viajes, no por vehículos”. Eso tiene que ver directamente con el negocio de Ancap.

MJ —Sí, y nosotros de hecho ya venimos trabajando con UTE desde la distribuidora Ducsa. El 28 de diciembre se inauguró la primera ruta eléctrica en América Latina, que va desde Colonia del Sacramento hasta Punta del Este, fuimos con Gonzalo Casaravilla, presidente de UTE, inaugurando puntos de recarga, la mayoría de ellos en estaciones de Ducsa. Creo que nadie cuestiona la transición hacia la movilidad eléctrica. La idea es que Ancap se sume a esa transición, va a haber que tener una serie de opciones tecnológicas para transitar ese cambio dándoles opciones a los usuarios, a los clientes. Hay una serie de usos como el transporte pesado en que no está tan claro que la batería sea el combustible elegido, lo mismo los biocombustibles. Entonces creo que definitivamente hay un lugar para los procesos químicos y físicos tipo destilación, producciones, como hace Ancap, los biocombustibles, incluso el hidrógeno. Nos parece que este es el momento de empezar a prepararse para eso.

EC —En particular, todo indica que los combustibles fósiles van a desaparecer de los motores. La pregunta es en qué proceso, dentro de cuántos años. Y allí está “atacada” la médula de lo que conocemos como Ancap, porque Ancap es Administración Nacional de Combustibles, Alcohol y Portland, pero siempre la identificamos con combustibles y el símbolo básico es la refinería de La Teja. Entonces, ¿qué es lo que están proyectado en esa materia?

MJ —En esa materia es una industria madura…

EC —¿Qué quiere decir una “industria madura”?

MJ —Todas las industrias tienen un ciclo: cuando la tecnología es incipiente, cuando se prueba, cuando se optimiza, cuando ya se conoce y los cambios ya son menores, y llega un momento en que empieza a aparecer una sustitución, como en este caso; la generación térmica ya hace rato que está siendo desplazada y el transporte es la siguiente ola. En algún momento los combustibles fósiles ya no van a tener sentido. Pero como toda industria madura, en la medida en que empieza a declinar la demanda, es muy importante –por eso esa obsesión con la eficiencia, por eso esa obsesión con cada peso cuenta, con tener mucho cuidado con cuánta gente ingresa– prepararnos para proteger el margen el mayor tiempo posible, porque es el que nos va a dar el flujo de fondos para invertir en nuevas tecnologías, en nuevos procesos.

EC —Hay una dificultad grande, una especie de paradoja en esta materia, porque en los últimos años en Uruguay hemos asistido a un estallido en la cantidad de vehículos automotores, ha aumentado enormemente la cantidad de autos, camiones, motos, ciclomotores, por lo tanto hay mayor consumo de combustibles producidos por Ancap. Hemos tenido este crecimiento loco de estos años, pero lo que se viene es todo lo contrario, a partir de ahí va a venir una reducción de ese consumo.

MJ —Los autos que ya están ya están y van a estar por un cierto tiempo. Las principales automotrices están diciendo que van a dejar de fabricar motores de combustión interna.

EC —Lo señalo a propósito del desafío que implica por ejemplo en materia de personal o de organización, cómo ser flexible. Ese es uno de los retos que ustedes tienen por delante.

MJ —De los siete oradores, que hablaron de las cosa más diversas, si me pregunta cuáles fueron los temas que llevaron un hilo conductor a lo largo de todas las charlas, sobre los que tenemos que reflexionar mucho si queremos ver una Ancap exitosa por más décadas, fueron el tema de la velocidad de los cambios, el tema de los tiempos, que tienen que ver con eso de la agilidad, de adaptarse al cambio, y el otro es la cercanía con el cliente. Tenemos las posibilidades que nos dan el bigdata, la inteligencia artificial, etcétera, de proveer experiencias a la medida de cada usuario. Creo que es en esos dos ejes que tenemos que empezar a profundizar. Uno dice “los combustibles fósiles van a tender a desaparecer”, pero no hay que olvidar que por otro lado tenemos una red de estaciones de servicio que cubre absolutamente todo el país y hay un montón de tendencias que indican que estar posicionado en lo que se llama la última milla para llegar a cada punto donde hay clientes, hay usuarios, es muy valioso, muy importante. Y algo que no es menor, y creo que es un cambio cultural que también tenemos que impulsar, es ver que tenemos enfrente un cliente. En general las grandes industrias, y sobre todo las monopólicas, no tienen demasiado desarrollado el concepto de cliente. Creo que ese es el futuro.

EC —Además lo tienen “cautivo”.

MJ —La distribución ya no es monopólica, pero en general, hay otros clientes grandes, creo que es un cambio casi en el genoma que tenemos que hacer.

EC —¿Cuándo vamos a ver novedades en esta materia?

MJ —Esto es un proceso que no se termina nunca.

EC —¿Hay algo previsto, alguna resolución cercana?

MJ —No, esto fue el puntapié inicial, hay que aterrizar en proyectos en última instancia, y en eso se está empezando a trabajar.

Comentarios