Entrevistas

Crean marcapasos pulmonar para bajar mortalidad de pacientes conectados a respirador artificial [21.12.2010]

Facebook Twitter Whatsapp Telegram

***

EC —Usted está radicado en América del Norte, primero se radicó en Estados Unidos y luego en Canadá, desde fines de los años sesenta.

AH —Sí, me fui en el 66.

EC —Todos conocemos el marcapasos, su utilidad en el caso de ciertas afecciones del corazón, pero en esta charla con usted nos estamos enterando de que existen otros marcapasos, que el marcapasos no necesariamente se aplica al corazón.

AH —Típicamente es para el corazón, pero estamos diseñando ahora algo parecido para otras funciones.

EC —¿Cómo y cuándo decidió embarcarse en este proyecto de un marcapasos pulmonar en base a electrodos intravenosos?

AH —Fue exactamente hace cuatro años, y fue acá en Montevideo en el Sanatorio Americano. Tuve que venir antes de lo planeado, íbamos a venir a fin de año a visitar a mi madre, pero tuve una llamada de mi hermana porque mi madre estaba muy grave de repente, estuvo internada en el Sanatorio Americano, con alta fiebre, infección urinaria y pulmonar. A los tres o cuatro días estaba bien, primero tenía fiebre, después no tenía fiebre, pero de golpe el 2 de diciembre hace cuatro años la internaron directamente en el CTI con una obstrucción respiratoria, un cuadro agudo de septicemia y en coma. Eso fue tres o cuatro días después de estar en el hospital y estar bien; media hora antes estaban charlando y riéndose, aunque estaba fatigada y con tos. Pero en ese momento cuando entró al CTI la sedaron y la conectaron a un respirador, y ahí me tomé un avión, y estuve cinco semanas viendo qué estaba pasando. Era terriblemente preocupante, porque a los pocos días dijeron “la infección pulmonar está controlada, vamos a ver si empieza a respirar de nuevo”. Y ya no estaba sedada, pero no podía respirar bien, podía respirar, pero se fatigaba y a las pocas horas no podía respirar más, entonces le decían “ahora te vamos a dejar descansar por la noche, te vamos a conectar de nuevo el respirador, así dormís bien, y mañana probamos de nuevo”.

EC —Ese es todo un problema en el caso de los pacientes conectados a un respirador artificial, el momento en el que hay que intentar el “destete”. No siempre se puede.

AH —Hay más o menos un 30 % de pacientes que falla en el destete y se convierte en dependiente de ventilación. Y este es el principio del fin, esos pacientes tienen siete veces más chances de morir en el hospital. Si uno no puede empezar a respirar naturalmente ya está, e incluso si se recupera es un paciente muy crítico a esa altura.

Entonces yo estaba viendo qué pasaba, había una infección, había una pulmonía ya controlada. Entretanto, en esas cinco semanas se agarró otras dos de estas infecciones hospitalarias, que primero hay que ver qué es y después encontrar la manera de tratarlas, pero cada vez que un paciente se agarra una de estas infecciones se queda de promedio diez días más en el CTI, y está cada vez más débil. Entonces me di cuenta de que si el paciente está tratando de respirar pero se fatiga y no puede respirar más debe de tener que ver con que el diafragma pierde fuerza, porque todos los músculos que no se usan se atrofian. Yo no estaba totalmente al tanto entonces, y la publicación que lo demostró salió dos años más tarde, en el 2008, pero claramente el diafragma se atrofia muy rápidamente en estas condiciones en que no está en uso porque el paciente está sedado y ventilado. El diafragma se atrofia a menos de la mitad de su tamaño en menos de 24 horas, es terrible.

EC —Ese dato es impactante.

Comentarios