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Sobre el proyecto Viñoly para San Rafael

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El grupo hotelero internacional Cipriani firmó a comienzos de febrero un acuerdo de compra por el Hotel San Rafael de Punta del Este, y anunció una inversión estimada en US$ 200 millones para reacondicionar el viejo edificio y construir dos torres en el mismo predio. La obra estará a cargo del arquitecto Rafael Viñoly. Según destacó la Intendencia de Maldonado, la operación fue posible por un decreto de 2017 que modificó la ordenanza municipal, y permite la construcción de otros edificios en ese predio. El proyecto, presentado la semana pasada, despertó críticas en las redes sociales.


Aprecio enormemente este nuevo proyecto del arquitecto Viñoly, un nuevo símbolo para la ciudad más exclusiva del Uruguay.

Lo nuevo genera rechazo en nuestra vieja y conservadora sociedad uruguaya.

Punta del Este había atesorado la mejor muestra mundial de la arquitectura europea, generada y expresión fiel del origen europeo de nuestra comunidad. Uruguay es el país más europeo del mundo, incluyendo a la misma Europa, hoy con un 10 por ciento de no europeos.

Ese tesoro fue destruido en los últimos 35 años o más por horrendos edificios de apartamentos. Esta torre, que será la más alta de América Latina, no empeora sino que al final redime lo ya mal hecho.

A su vez el Grupo Cipriani, respetuoso por tradición de lo bello, conserva el estilo Tudor del San Rafael y los edificios nuevos. Los italianos como el Sr, Cipriani respetan la historia arquitectónica de los edificios, porque han nacido en una nacion que en sus ciudades y pueblos conservan todo lo que es su historia. Por eso, Ialia es el museo abierto más importante del mundo.

Supimos destruir el patrimonio arquitectónico de Montevideo para construir los hormigueros de cemento de Pocitos. Somos verdaderos asesinos de nuestra historia.

Apoyo por todo esto al proyecto de Cipriani en Punta del Este, y estoy dispuesto a sostenerlo en cualquier ambito público.

Mario Ventre
Vía correo electrónico


Todo muy pintoresco. Ahora me pregunto:

¿Para qué se hacen los planes de ordenamiento?

¿Para qué las ordenanzas, si cada nuevo proyecto las quiebra?

Específicamente, de este proyecto no he visto nada novedoso ni en temas energéticos ni de saneamiento, entre otros.

Así no veo lo novedoso de este proyecto de urbanización concentrada.

Como decían en la escuela, "puede y debe mejorar".

Raúl E. Viñas
Vía correo electrónico


Si Cipriani adquirió el hotel, ¿cómo es que se debe la contribución inmobiliaria de 10 de los padrones de la manzana, por más de diez millones de pesos?

Un comentario sobre las firmas recogidas en contra del proyecto: no crea nadie que se está juzgando el valor puramente arquitectónico del proyecto (nadie podría hacerlo con los mínimos elementos que se han mostrado…).

Lo que indigna a muchos de los que firmamos es esa manera de pensar sobre el futuro de Punta del Este: hay quienes piensan que debe estar librado al puro impulso del dueño de la tierra y del inversor privado; otros creemos en el ordenamiento territorial, la participación de toda la comunidad en la planificación del crecimiento, y la sustentabilidad del desarrollo del futuro de Punta del Este y del Turismo en Uruguay.

Pedro González
Vía correo electrónico


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