EnPerspectiva.uy

Entrevista, martes 3 de abril: Pablo Abdala

Facebook Twitter Whatsapp Telegram

EC —Mencionaba recién que cuando GNLS tiene problemas con OAS, por cómo se había complicado y demorado la obra, termina resolviendo que se retira del proyecto, y a partir de esa decisión del presidente de la República, Tabaré Vázquez, Gas Sayago rescinde el contrato con GNLS. Desde entonces el gobierno buscó otras alternativas, por ejemplo firmó ese memorándum de entendimiento con Shell para el diseño de un proyecto de menor porte, pero de todos modos ahí no se acordaron las potenciales inversiones o un modelo de negocio. El memorándum de entendimiento, que dio lugar a su propia polémica, existió pero venció, el 31 de marzo terminó el plazo que tenía Shell para presentar la propuesta y no lo hizo. Queda por saber los pasos que va a dar el gobierno. ¿Qué dice usted de esta última etapa, de este proceso?

PA —Algo curioso y que parece paradójico, pero creo que este dato de que el gobierno no haya prorrogado el contrato con Shell y no haya anunciado un acuerdo definitivo, de los escenarios negativos que teníamos por delante, no es el peor.

EC —¿Cuál era el peor?

PA —El peor era avanzar en una solución como la que se bosquejó en ese memorándum de entendimiento, que fue mucho más que un memorándum de entendimiento, yo lo he llamado –a la ministra no le gustaba, la llamé a sala en la comisión permanente– contrato preliminar. Porque el memorándum de entendimiento no era solo establecer un marco para una negociación, ya tenía definiciones muy concretas del modelo de negocio. Y a mi juicio implicaba entregarle a Shell en el mediano y largo plazo el manejo del mercado del gas natural en el Uruguay. Porque se establecieron una serie de condiciones muy claras, muy notorias en cuanto a que Shell tendría la mayoría de las acciones de la nueva empresa, la operación de la nueva empresa, el 100 % del derecho de utilización, y fijaría por sí sola –no el Estado uruguayo– la tarifa de regasificación, que después en la tarifa final incidiría en el precio del metro cúbico. No le garantizaba al Uruguay –está escrito– el suministro de gas natural, porque decía que las partes se esforzarían por satisfacer la demanda interna de los consumidores uruguayos. Entonces íbamos en un camino muy complicado que me daba la sensación de que el gobierno estaba dispuesto, con tal de que se construyera algo, para salvar algo de lo que hemos venido cementando, a darle todo lo necesario a Shell. Eso por lo menos parece que se ha descartado.

EC —Y ahora, según han dicho las autoridades del MIEM, lo que ha señalado por ejemplo la directora nacional de Energía, Olga Otegui, comenzó otro período en el que puede continuar negociándose con Shell o con otros interesados.

PA —Eso no es verdad. Lo digo con enorme respeto, pero se equivoca la directora de Energía por una razón muy sencilla: primero, por la razón del sentido común, si al cabo de un año y tanto –porque el presidente de la República anunció a fines de 2016 que empezaba una negociación con Shell– no se ha llegado a un acuerdo y termina el memorándum de entendimiento o la etapa previa y se anuncia que no hay nada, entonces con Shell no hay nada. Y con terceras empresas tampoco puede haber algo por una razón muy sencilla: creo que la directora de Energía no se acordó de que en el memorándum de entendimiento hay una cláusula, que esa no cae, esa precisamente opera a partir de ahora, que hay un período de un año desde la rescisión del memorándum de entendimiento a favor de Shell, que le da la exclusividad. Si Gas Sayago o el Estado uruguayo resolvieran construir una regasificadora en ese lugar, Gas Sayago está obligado a convocar o a invitar a Shell a formar parte del negocio. Entonces es muy difícil que venga otra empresa a interesarse para construir algo allí.

EC —Entonces, ¿qué debería hacer el gobierno en este punto?

PA —Sincerar la discusión, reconocer –lo deberían haber hecho hace mucho tiempo, pero se han empeñado enfáticamente en negarlo– que esto salió mal.

EC —Y entonces, de ahora en adelante, ¿hacer qué? ¿Murió toda esa infraestructura que quedó a mitad de camino y no hay regasificadora ninguna?

PA —Lo que nos queda es un conjunto de pilotes. Tiene que ver con lo que le decía de las concesiones que le hicimos a GNLS, habría que haberle reclamado que limpiara la bahía, que sacara todos esos pilotes que están todos oxidados hoy allí, donde se iba a construir la planta, mal alineados, que no tienen ningún valor y que en todo caso servirían, si estuvieran bien colocados, para el proyecto que se iba a hacer, que no se va a hacer de esa magnitud.

EC —Entonces para usted hay que dar por bajada la cortina.

PA —Salvo que alguien…

EC —… y asumir las pérdidas.

PA —¿Y cuál es la alternativa? ¿Dónde está? ¿Quién la tiene? Hace tres años y medio que están paradas las obras, o casi, se pararon en febrero de 2015. Yo pregunto ¿hay algo, hay verdaderamente una alternativa factible, viable? El sindicato del gas el otro día decía “Abdala solo sabe criticar”. Yo he dicho mil veces que estoy dispuesto a hablar y que no me niego a que el país tenga una regasificadora, pero cerremos este capítulo, que ha sido muy negativo, imputemos esto a pérdida, como ya lo está imputando Gas Sayago, porque las pérdidas de US$ 17 millones en 2016 tienen que ver con que echaron a pérdida parte de lo que se había invertido en el dragado, por ejemplo. Y pensemos en una regasificadora con otras dimensiones y en otro lugar. Creo que hay que repensar el tema.

EC —Para usted hay que cerrar Gas Sayago además ya.

PA —¿Qué sentido tiene mantener una empresa que tiene un costo de cerca de US$ 10 millones por año, que es más –para tener una referencia– de lo que nos costó, lo que le costó al país descontarles el IVA a los autoconvocados en las compras de gasoil? Eso tiene un costo de US$ 7 millones; ahora estamos gastando casi US$ 10 millones por mantener una estructura como la de Gas Sayago que no tiene ninguna razón de ser. No la tiene desde hace mucho tiempo, ahora que se cayó esto con Shell, mucho menos.

EC —En estas horas, en esta semana, el MIEM va a hablar.

PA —Esperemos.

EC —Se conocerá entonces cuáles son los pasos previstos.

PA —Vamos a invitar a la ministra a comisión además, en el día de hoy vamos a presentar la solicitud.

Video de la entrevista

***

facal-v2-banner-en-perspectiva-net

***

Transcripción: María Lila Ltaif

Comentarios